Esta mañana se ha hecho oficial el desarrollo de una nueva serie que aspira a convertirse en el Juego de Tronos de Netflix. Geralt de Rivia, el protagonista de la saga literaria de Andrzej Sapkowski y de la trilogía de videojuegos The Witcher, dará el salto al popular servicio de televisión a la carta a través de una adaptación que, según el escritor que le dio vida, «permanecerá fiel al material original y a los temas en los que he empleado más de treinta años».
No es una afirmación hecha a la ligera. Sapkowski no se limitará a cobrar un suculento cheque, sino que trabajará como consultor creativo, un puesto similar al que George R.R. Martin ocupa en la producción de Juego de Tronos. De carácter receloso y algo cascarrabias, no cabe duda de que el autor polaco dará bastante guerra para que se respete su visión de los personajes en la pequeña pantalla. Sean Daniel (conocido por la trilogía de La Momia o la nueva versión de Ben-Hur) y Jason Brown (The Expanse) se sentarán en las butacas de productores ejecutivos.
Del equipo creativo se ha mencionado la participación de dos miembros de Platige Image, una compañía de producción y efectos visuales: Tomek Bagiński (nominado a un Oscar por el corto The Cathedral y ganador de un BAFTA por The Fallen Art) y Jarek Sawko. El primero, además, dirigirá al menos un episodio de cada temporada de la serie.
El universo de Geralt no es ninguna novedad para los chicos de Platige Image. Esta productora ya ha firmado algunas de las cinemáticas de presentación de los videojuegos y esta pareja de creativos demuestra haber captado muy bien su esencia al afirmar que «hay una profundidad moral e inteligente en estos libros que va más allá del género. Es una historia sobre el presente y los desafíos del presente, oculta tras una apariencia de fantasía. Es una historia sobre nosotros, sobre el monstruo y el héroe que hay dentro de nuestros corazones«.