Tenía que suceder en algún momento y parece que será con Black Ops 4 cuando se de el paso. Según fuentes cercanas al desarrollo, según publica Polygon, el próximo Call of Duty será el primero que prescindirá de una campaña para un jugador tradicional, en favor del multijugador.
Al parecer, problemas de tiempo han llevado a la decisión de cancelar ese elemento y dedicar más recursos a ofrecer un robusto cooperativo y expandir el modo zombie. Además, Kotaku añade que el juego podría subirse al carro de los «battle royale» para tratar de competir con los shooteres de supervivencia de moda: Fortnite y PUBG.
Habrá que esperar hasta el 17 de mayo, fecha de presentación oficial, para conocer definitivamente por dónde van a ir los tiros. Está previsto que el juego salga a la venta el 12 de octubre para PC, PS4 y Xbox One.